NOTA ORIGINAL: LUCES DEL SIGLO
El turismo rural puede complementar el desarrollo de los pequeños productores agropecuarios en México, pero tiene algunos riesgos que deben considerarse. Si bien genera empleo, nuevos servicios y mayor ingreso en una región, deben tomarse en cuenta las implicaciones negativas de impulsar un proyecto como éste porque puede ponerse en riesgo la sustentabilidad ambiental, los ecosistemas involucrados y las formas de convivencia de la población local, advirtió el Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria (Cedrssa). Los productores de pequeña escala, que constituyen más del 80 por ciento del total, se caracterizan por tener carencias en medios de trabajo, crédito y capital para el desarrollo sustentable de sus actividades. Esto les impide obtener ingresos necesarios para cubrir sus necesidades cotidianas y provoca migración y pobreza, explicó en el documento “El turismo rural, una alternativa sustentable para los pequeños productores agropecuarios”.
Uno de los recursos más valiosos que se pone en riesgo cuando se instala un corredor turístico, es el agua, ya que se da preferencia en su uso a complejos turísticos residenciales frente al uso doméstico o agrícola. También que sitios históricos y paisajes puedan ser dañados por el exceso de visitas, encarecimiento del precio del suelo y el desplazamiento de la población local. No obstante, ofrece beneficios como generación de ingresos, desarrollo de proveedores locales y venta directa de los bienes y servicios.Nota original